Durante el embarazo, es común que las futuras mamás experimenten una serie de cambios en el cuerpo, y la necesidad de orinar con frecuencia es uno de los más comunes, pero ¿por qué ocurre este fenómeno y cómo saber si es normal o si puede ser un síntoma de otro problema? ¡Sigue leyendo porque aquí resolveremos todas tus dudas!

¿Por qué orino con más frecuencia durante el embarazo?

A medida que el embarazo avanza, el útero crece y empieza a presionar la vejiga, lo que puede hacer que tengas ganas de orinar más seguido; además, el aumento en el flujo sanguíneo incrementa el trabajo de los riñones para filtrar los desechos de ambos, tanto de la mamá como del bebé, lo que genera más orina de lo habitual. Las hormonas también influyen: la progesterona relaja los músculos, incluyendo los de la vejiga, y contribuye a que la micción frecuente se vuelva una realidad en esta etapa.

¿La orina constante en el embarazo puede ser síntoma de un problema?

Aunque es normal orinar más durante el embarazo, en ocasiones esta necesidad puede indicar una infección urinaria o cistitis. Estar atenta a ciertos síntomas puede ayudarte a diferenciar entre una necesidad común de orinar y un problema que deba ser atendido.

¿Cómo saber si tengo cistitis o una infección urinaria?

¡Identificar las diferencias es muy sencillo! Si además de orinar frecuentemente sientes ardor, dolor al orinar, molestias en el bajo vientre o percibes que la orina tiene un olor fuerte y color oscuro, podrías estar ante una infección urinaria; las infecciones urinarias son bastante comunes durante el embarazo y deben ser tratadas con rapidez para evitar complicaciones. En caso de tener estos síntomas, consulta a tu médico para obtener un tratamiento adecuado.

¿Cómo controlar la micción frecuente en el embarazo?

Aunque existen algunos tips que puedes seguir para que la frecuencia de la micción disminuya, debes comprender que este es un síntoma común del embarazo y que, ¡no debe preocuparte! Sigue estos consejos y vive con más confianza:

1. Evita los líquidos antes de dormir: tratar de reducir la ingesta de líquidos durante la noche puede ayudar a evitar el sueño interrumpido por visitas al baño. Durante el día, es importante beber agua regularmente, pero intenta disminuirla un par de horas antes de acostarte.
2. Mantente hidratada adecuadamente: aunque puede parecer contradictorio, es importante no reducir drásticamente la ingesta de líquidos durante el día. Beber suficiente agua ayuda a mantener los riñones funcionando bien y a eliminar toxinas del cuerpo, lo cual es esencial durante el embarazo.
3. Reduce la cafeína: la cafeína es un diurético natural y puede aumentar la necesidad de orinar. Limitar o eliminar el café, el té y otras bebidas con cafeína no solo te ayudará a controlar la micción, sino que es una recomendación general para un embarazo saludable.
4. Practica ejercicios de Kegel: estos ejercicios fortalecen el piso pélvico, lo que ayuda a mejorar el control de la vejiga y reduce la frecuencia de orina. Además, son beneficiosos para prevenir la incontinencia urinaria postparto.
5. Inclina el torso hacia adelante al orinar: esta postura ayuda a vaciar la vejiga de manera más completa, reduciendo las veces que sientas ganas de volver al baño poco después. Asegúrate de estar relajada y tomarte el tiempo necesario.
6. Divide las comidas en porciones más pequeñas: comer varias comidas pequeñas a lo largo del día, en lugar de grandes cantidades de una sola vez, puede ayudar a reducir la presión sobre la vejiga y facilitar la digestión.
7. Visita el baño cuando tengas la oportunidad: si tienes una rutina en la que puedes planificar visitas regulares al baño, intenta ir incluso cuando no sientas mucha necesidad. Esto puede ayudarte a evitar situaciones de urgencia en momentos incómodos o fuera de casa.
8. Utiliza protectores si es necesario: en algunos casos, la frecuencia de la micción puede ser difícil de manejar y ocasionar pequeñas pérdidas. Usar protectores diarios puede brindarte comodidad y evitar molestias durante el día.

Si la micción frecuente iene acompañada de molestias como dolor, ardor o urgencia intensa, es recomendable consultar con el médico para descartar posibles infecciones urinarias. Con estos hábitos, muchas mujeres logran sobrellevar este síntoma común del embarazo con mayor comodidad y tranquilidad.

Prevención de problemas en las vías urinarias

Durante esta hermosa etapa, es esencial que te cuides, y uno de estos cuidados esenciales, es a las vías urinarias, porque corres el riesgo de desarrollar incontinencia o algunos otros síntomas relacionados; para esto te recomendamos que:

• No aguantes nunca las ganas de orinar.
• Evitalos alimentos irritantes.
• Practica ejercicios de kegel.
• Consume suficiente fibra para que evites el esfuerzo pélvico por estreñimiento.

¿Cuándo consultar al médico?

Si bien orinar con frecuencia es normal, si llegas a notar alguno de estos síntomas es recomendable que consultes con tu médico:

• Dolor o ardor al orinar
• Sangre en la orina
• Fiebre o malestar general
• Sensación constante de no haber vaciado la vejiga

Tu médico podrá indicarte estudios para descartar infecciones y ofrecerte recomendaciones específicas para tu caso.

Productos TENA para la incontinencia en el embarazo

Para muchas mujeres, la micción frecuente puede acompañarse de pequeñas pérdidas involuntarias. Los productos TENA están diseñados para ofrecer una absorción confiable y discreta, brindando comodidad y seguridad a las mujeres en todas las etapas de la vida. Durante el embarazo, los protectores diarios pueden ser unos grandes aliados; y, si es necesario en casos de filtraciones, las toallas higiénicas serán indispensables para que te sientas más cómoda y segura mientras disfrutas de esta hermosa etapa.