Marzo es el mes donde de manera internacional hablamos de incontinencia urinaria, ya que el 14, es el Día Internacional de esta condición. En TENA ponemos énfasis en seguir educando y derribando mitos. Por eso, a lo largo de este artículo te contaremos todo lo que necesitas saber para tratar la incontinencia urinaria, cuándo optar por una operación y cómo es la recuperación. ¡Sigue leyendo!
¿Cuál es el mejor tratamiento para la incontinencia urinaria?
Recordemos que nunca un escape de orina, en ninguna etapa del ciclo vital, será normal, por lo tanto, ante esta situación es importante estar atentos y no esperar mucho tiempo para consultar a un profesional. Puede ser el momento de prevenir el avance con terapias y no, como muchos piensan, optar a una operación que es una opción en etapas avanzadas donde médicamente ya no se cuenta con otras alternativas.
Mónica Venegas, kinesióloga de Piso Pélvico, comenta, “cuando una persona consulta por incontinencia de orina viene con la idea de que la primera opción de terapia es la cirugía. Sin embargo, la primera opción es la rehabilitación del piso pélvico que es una terapia especializada con ejercicios de estos músculos para evitar los escapes de orina”
¿Cuándo es recomendable una cirugía para la incontinencia?
La operación por incontinencia de esfuerzo es más invasiva y tiene un riesgo más elevado de complicaciones que muchas otras terapias, pero también brinda una solución a largo plazo en casos graves.
Las opciones quirúrgicas dependen del tipo de incontinencia urinaria. La mayoría de las opciones para la cirugía de incontinencia urinaria tratan la incontinencia de esfuerzo. Sin embargo, existen alternativas quirúrgicas de bajo riesgo para otros problemas de vejiga, entre ellos, la vejiga hiperactiva, también denominada “incontinencia imperiosa”.
¿Qué tener en cuenta antes de pensar en operarse?
Antes de optar por una cirugía para la incontinencia urinaria, debes pensar muy bien en los siguientes temas:
• Obtén un diagnóstico preciso. Los diferentes tipos de incontinencia necesitan diversos abordajes quirúrgicos. El médico puede derivarte a un especialista en incontinencia, un urólogo o un uroginecólogo para realizar un análisis de diagnóstico más a fondo.
• Piensa en tus planes de tener hijos. Es probable que el médico te recomiende esperar para realizar la cirugía hasta después de la maternidad. La presión del embarazo y del parto sobre la vejiga, la uretra y los tejidos de sostén puede anular los beneficios de la reparación quirúrgica.
• La operación para la incontinencia urinaria está diseñada para corregir sólo el problema que debe tratar. La cirugía no cura todas las incontinencias urinarias. Por ejemplo, si tienes incontinencia mixta (una combinación de incontinencia de esfuerzo y vejiga hiperactiva), es probable que la cirugía mejore la incontinencia de esfuerzo, pero no la vejiga hiperactiva. Todavía podrías necesitar medicación y fisioterapia después de operarte para tratar la vejiga hiperactiva.
Riesgos de la cirugía para Incontinencia Urinaria
Como cualquier cirugía, conlleva riesgos. Aunque son poco comunes, las posibles complicaciones incluyen las siguientes:
• Dificultad para orinar temporal y vaciado incompleto de la vejiga (retención urinaria)
• Vejiga hiperactiva, que podría incluir la incontinencia urinaria por urgencia
• Infección de las vías urinarias
• Relaciones sexuales dolorosas
¿Cómo es la recuperación?
Las 6 semanas siguientes a la operación para la incontinencia urinaria, ¡son claves en el proceso de recuperación! Durante este tiempo, el profesional de salud le recomendará guardar reposo, evitar cualquier sobreesfuerzo. Sin embargo, esto no quiere decir que debas quedarte en cama todos los días, por el contrario, es necesario que camines un poco para que el flujo sanguíneo se mantenga activo.
Es común que después de la operación notes un poco de sangrado, dolor en la zona, incomodidad al orinar o que te sientas más cansado/a de lo habitual. También, podrás tomar algunos analgésicos que te ayudarán con estas molestias, pero si notas que no disminuyen con el tiempo, es importante que vayas donde el especialista para revisar que todo anda bien.
Otros consejos que el especialista podrá determinar, según tu caso, son:
- Seguir una dieta rica en fibra para evitar el estreñimiento del paciente
- Postergar las relaciones sexuales hasta 4 o 6 semanas después de la operación
- Postergar el deporte hasta 6 u 8 semanas después de la operación
- Si se deben subir o bajar escaleras, procurar hacerlo muy despacio
Es probable que después de 6 o 10 días después de la operación para la incontinencia te sientas mejor, pero debes seguir los cuidados que te ha recomendado el cirujano o especialista por más tiempo, ¡así que la recuperación también depende de ti!
Evalúa todas las posibilidades antes de operarte
Recuerda que hay muchas alternativas que puedes tomar antes de considerar la operación. Para conocerlas, es importante que lleves un proceso muy de la mano con tu especialista, que examinen a profundidad tu diagnóstico y evalúen juntos las opciones disponibles. Desde terapias físicas, como los ejercicios de Kegel, cambios en el estilo de vida, o incluso tratamientos médicos específicos, hay alternativas que podrían ayudarte a mejorar tu calidad de vida sin necesidad de una intervención quirúrgica. ¡Solo es cuestión de informarte bien!